lunes, 29 de marzo de 2010

Hold Me Tight

14 de Mayo en Málaga...y el 20 de Abril en el Liceu...otro buen concierto que me pierdo en la Ciudad Condal.
La canción es del disco anterior, pero es mucho mejor que el disco nuevo, al menos lo que he llegado a escuchar...

miércoles, 17 de marzo de 2010

Secretos y mentiras

Di, qué será de ti, qué será de mi,
Cuando estalle el fin,
esta relación,
tu me dirás que no,
nada sucedió.

"Apagad la luz,
guardad toda aquella ropa en un baúl
y arrojad la llave".

Querías un regalo
Y yo derramé encantado
con un grito entre tus tetas
aquel collar de perlas
y en ese instante el mundo terminó
y él apareció a plena luz del sol.

Nadie rechistó,
así que me acerqué,
le dije entonces ¿qué?
él dijo ¿qué de qué?
y yo "apagad la luz
guardad toda aquella ropa en un baúl
y arrojad la llave".

Hace mucho tiempo
que ya hace mucho tiempo
de cualquier cosa en mi vida,
mi vida malherida,
alejaos que ahora envejezco.

Gente nace y gente muere cada día,
los demás nos limitamos a estorbar
y jugamos a secretos y mentiras
y despues nos lamentamos.

Que viva el ser humano,
la gente grita "!hey, hey...¡"
"Bien" dice entonces él
"veo que tienes sed
yo te la apagaré
a base de chas, chas, chas"
pero llega alguien más.

Y le oigo balbucear
"Apagad la luz,
guardad toda aquella ropa en un baúl
y arrojad la llave".

Por allí huyen unos,
por allá los otros,
¿Quién entre ellos, por lo tanto,
se está equivocando?
Decídmelo que estallo...

Gente nace y gente muere cada día,
los demás nos limitamos a estorbar
y jugamos a secretos y mentiras
y despues nos lamentamos.

Que viva el ser humano,
la gente grita "!hey, hey...¡"

Gente nace y gente muere cada día,
los demás nos limitamos a estorbar
y jugamos a secretos y mentiras,
"Por favor defíname la eternidad"

Gente nace y gente muere cada día,
los demás nos limitamos a estorbar
y jugamos a secretos y mentiras,
como el niño cruel que acecha,
como aquel gran atleta
drogado en la carrera
nueve segundos restan
la guerra empieza...
"¡hey...!"

lunes, 15 de marzo de 2010

El día después

Eran muchos días los que él veía pasar delante de sus ojos. Días vacios. Días que no trasnmitian nada. Simplemente pasaban.
La procesión iba por dentro, como casi todo en su vida. Argumentos, dudas, preguntas se almacenaban ahí dentro, sin salir, sin salida, sin ayuda. No soportaba pedir ayudar, lo detestaba de una manera irracional, casi inhumana, pero así era él.
Se escondia del sol, la noche había palidecido su alma hasta tal punto de no encontrar cobijo cuando era la última esperanza que le quedaba.
No obstante, respiraba...o eso creía y ya era mucho para el día después...